Pequeños pero importantes detalles

Alguna ves me dije a mi mismo: “todos tenemos manías y particularidades”, me veo a mi mismo a través de estas particularidades y me imagino que para otras personas mis forma de concebir el mundo pueda parecerles aburrido, extraño y hasta pretensioso, argumentos con los cuales puedan criticarme, al igual que los argumentos que yo encuentro para criticar a otros; es que demostramos parte de nuestra personalidad a través de esos pequeños detalles de nuestra conducta, pero son esos pequeños detalles los que cuentan mucho de nuestro ser.

Entonces parte integrante de nuestra vida social es conocer y percibir esos detalles, aunque la mayoría de las veces los ignoramos y los pasamos por alto. Solo a través del tiempo es que empezamos a identificarlos, ese tiempo que nos toma identificar aquellos detalles molestos o agradables de nuestras parejas, ese tiempo que pasamos con nuestros seres queridos y por los cuales conocemos sus personalidades, ese tiempo en el cual identificamos y calificamos a nuestros amigos. Es ese tiempo el que poco a poco nos muestra las diferentes facetas de las personas y al conocerlas recién comprendemos sus actitudes y personalidad. A veces al conocer esos pequeños detalles terminamos decepcionados y con problemas de relación, otras veces nos reconfortan, es por ello que conocer esos pequeños detalles nos puede facilitar comprender a las personas.

Claro que no basta con conocer esos detalles, algunas personas las evitan, en lo particular me parece exagerada esta conducta, considero que para lograr una comprensión razonable es necesario aceptar esos detalles, si no somos capaces de aceptarlos no lograremos comprender realmente a las personas, no lograremos comprender nuestra propia humanidad y estaremos en continua búsqueda infructuosa de nuestra propia aceptación.

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